La madera de nogal es un tipo de madera maciza que supera ampliamente cualquier expectativa. Considerada una de las especies más heterogéneas con, al menos, 30 subespecies reconocidas, posee un tono y veteado singular que levanta pasiones en el sector. Como material ofrece importantes ventajas ya que es fácil de manipular y admite numerosos acabados pero, es su particular estética lo que la convierte en una madera especialmente valiosa. Versátil, hermosa, robusta y prácticamente perfecta, la madera maciza de nogal es todo un dechado de virtudes.

El árbol que da origen a la madera maciza de nogal es antiguo y de crecimiento lento, lo que le confiere una serie de características mecánicas únicas y de un alto valor económico. Procedente de Asia y Europa Central, es considerada una madera pesada o semipesada en función de su densidad. Resiste estoicamente el paso del tiempo y permanece estable ante los cambios térmicos y de humedad. De grano grueso, fibra recta y una riqueza cromática soberbia, la madera maciza de nogal es ideal para saciar las necesidades de los proyectos más variados y exigentes.

La madera maciza de nogal, precisamente gracias a sus abundantes cualidades, posee múltiples usos. De hecho, es una de las opciones más convincentes para revestimientos interiores y exteriores, recubrimientos de tableros, producción de mobiliario de alta calidad, trabajos de carpintería interior y ebanistería e incluso fabricación de armas de fuego y torneados. No hay proyecto que no pueda enriquecerse con las bondades técnico-estéticas de la madera maciza de nogal.